Colmado Wilmot, un nuevo hotspot barcelonés dedicado al buen comer
Colmado Wilmot es una pequeña bodega y tienda de ultramarinos ubicada en el barrio de Sant Gervasi, donde preparan sabrosos guisos y platillos para compartir, que pueden disfrutarse allí mismo o en casa.
Contacto: 932 47 47 82
Dirección: C/ Calvet, 28 (Barcelona)
Horario: Todos los días de 8 a 17 h.
Capitaneado por el chef Eugeni de Diego – uno de los ex-jefes de cocina de la era gloriosa de ElBulli y creador del exitoso asiático Tamae junto a Albert Raurich o el italiano Lombo –, «el Wilmot» recibe su nombre por el poeta inglés del siglo XVII, Conde de Rochester, libertino, extravagante, hedonista y controvertido…
“Nuestro colmado es un lugar hedonista donde sentarse a disfrutar comiendo buen producto y bien guisado.”
Asimismo, y aunque Colmado Wilmot abrió recientemente, lo cierto es que ese mismo local durante décadas albergó la La Campana, un templo de comida gallega tradicional, a pesar de que estéticamente han hecho borrón y cuenta nueva.
“El briefing fue muy claro: Queremos un bar-colmado de toda la vida.”
De hecho, ha sido Conti, Cert quienes se han encargado de su acertadísimo interiorismo, logrando aunar minimalismo con la sensación de hogar.
Para ello, han creado un espacio diáfano para introducir la mayor luz natural posible, con techos vistos de volta catalana para ganar la máxima altura, mobiliario y sillas de madera diseñadas por el estudio y algunos objetos se adquirieron en diferentes anticuarios para mantener la esencia de «bar de toda la vida».
Las lámparas tienen un papel relevante ya que buscaban una ambiente tenue. Para ello, buscaron luminarias de iluminación suave – algunas son de Santa & Cole y otras son recuperadas de anticuarios y muchas diseñadas por las propias interioristas -. También apostaron por materiales nobles como madera y mármol, por suelos hidráulicos, madera, acero inoxidable, tejidos cálidos y una paleta de color neutra muy acertada.
Al frente de la cocina están Adrián Redondo y su mano derecha, David Guitart
“En Colmado Wilmot se come a base de bien.”
Por un lado, está la tienda donde venden desde exquisitos embutidos como la célebre sobrasada picante de Can Company o su novísima figatella, la nueva apuesta del charcutero mallorquín Xesc Reina, huevos, leche, quesos, productos Gourmet, vinos – cuentan con una basta selección de más de 120 referencias -, conservas, salsas caseras hechas por ellos y pasta envasada artesana, entre otros productos, así como sus extraordinarios platos de cuchara listos para llevar. Y una buena selección de vinos, que venden y sirven a copas.
Desayunos y comidas para el recuerdo
En Colmado Wilmot ofrecen desayunos y comidas con productos de excelente calidad, centrándose siempre en el origen, el sabor y las elaboraciones de cada uno de ellos.
Para el primer bocado del día sirven dulces artesanos que proceden de algunas de las pastelerías favoritas de Eugeni De Diego, y sabrosos bocadillos elaborados con pan de flauta.
Algunas de recomendaciones imbatibles son el de fuet, el cubanito, el de sobrasada y miel o el de calamares con allioli y cebolla encurtida. Todos ellos sientan de maravilla acompañados de un buen café de especialidad. ¡Menuda gozada!
Y al mediodía, guisos como el increíble ragout de sepia, las albóndigas Strogonoff, la capipota o el fricandó con espardenyes. Pero también su estupenda ensaladilla rusa, sus deliciosos pescados de lonja y mariscos como las cigalitas a la plancha o sus ricas tortillas de patata, que pueden acompañarse con sobrasada, gambas, callos, chistorra en la sidra, etc…
Además, lo interesante es que existe la posibilidad de pedir medias raciones, permitiéndonos degustar diferentes recetas.
Por supuesto, y como no podría ser de otra manera, en Colmado Wilmot el vermuteo está garantizado, así como el happy ending a base de postres artesanos. Muy recomendable.
¡Buen provecho!
(*) Fotos interiorismo: Claudia Maurino. Fotos gastro: Borja Arenas.
Deja un comentario